Escrito en NACIONAL el
¿Cómo se mueve el mañana, si el pasado sigue tan presente? Bea, acompañada por su fiel guitarra danzante, reflexiona sobre los sucesos que la han hecho madurar. Toma responsabilidad por cada decisión, buena y mala, que ha formado su personalidad. Acepta la culpa de los errores, y disfruta haberlos hecho. Si pudiera elegir, lo haría todo de nuevo, para seguir siendo y creciendo tal cual es.
Beatrice Kristi Ilejay Laus, mejor conocida como Beabadoobee, regresa con su tercer álbum de estudio “This Is How Tomorrow Moves”, en el que a través de 14 pistas, Bea nos lleva al interior de su mente y sus recuerdos, para entender el porqué de sus pasos y el porqué de su camino hacia mañana.
Crecer siempre duele a su manera. En “California”, Bea libera su enojo y estrés a través de su guitarra distorsionada, que contrasta con voz de susurro. Cansada y adolorida del trabajo que ama, Bea confiesa los pensamientos y recuerdos intrusivos que la golpean en cada gira; palabras que (hasta ahora) nadie conocía. No puede ni quiere detener su sueño, pero ahora tiene la prudencia para tomar un respiro.
Bea narra un mal día consigo misma en “Girl Song”. Bea se enfrenta al peor enemigo de muchas chicas como ella: el espejo. Sigue descifrando las trampas de su mente, que critica y aborrece su piel; que reprocha ayeres tristes; que revive remordimientos. Combate contra las lágrimas silenciosas con su mejor y única arma: su música. “Es sólo un mal día, como cualquier día”. La angustia desaparece por un instante. Esa frase la hace madurar un poco hoy. Las tristezas vienen y van, como el día y la noche. ¡Qué importa! Mañana será diferente.
A diferencia de canciones pasadas, Bea ya no busca culpables, ahora reconoce las consecuencias de sus decisiones. En “Ever Seen”, Bea adquiere una nueva claridad: decide ignorar y olvidar los errores y la angustia de su entorno, para solo concentrarse en aquello que más ama, los ojos de su amado. A pesar de lo turbulenta que puede ser la vida adulta, crecer trae consigo la paz de saber qué es lo más importante…
Como lavar platos y tirar la basura juntos. La nostalgia ataca a Bea en “Coming Home”, donde lanza un suspiro de amor a su pareja que la espera en Reino Unido. Bea añora esos momentos tan pequeños y mundanos, que le inundan el corazón con su cadencia de canción de cuna. La fama y el glamour de Hollywood no se comparan a una tarde somnolienta abrazados en el sillón. Nunca se llega tarde a casa.
“No esperes la marea para meter tus pies”, canta Bea en “Beaches”, desde las playas de California, donde trabajó junto al mítico productor Rick Rubin. Bea mira el horizonte del mar que se come el sol de un día más. A 7 años de su repentino golpe de fama, Bea apenas encuentra su refugio musical. Acompañada en espíritu por las personas (y gatos) que ama, tiene el valor para adentrarse en aguas desconocidas, vivir un nuevo mundo, sufrir más errores y (simplemente) crecer.