Escrito en NACIONAL el
Los exdirigentes nacionales del PRI, Dulce María Sauri, Pedro Joaquín Codwell y Enrique Ochoa calificaron como una farsa el proceso mediante el cual resultó electo Alejandro Moreno Cárdenas, como presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional.
Al fijar su postura sobre el tema, acusaron al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación de “ser permisivo” ante el atraco de la dirigencia tricolor que culminó con la reelección de Alito Moreno, a partir de una reforma ilegal de los estatutos y un procedimiento fuera de la ley para secuestrar al partido.
Insistieron en que la Asamblea Nacional donde se aprobaron las reformas estatutarias que permitieron la reelección de Moreno Cárdenas, tiene múltiples ilegalidades en cuanto a su ejecución, ya que el Reglamento para su organización no fue aprobado por el Consejo Político Nacional.
Los expresidentes y la expresidenta del PRI criticaron que por primera vez se lleva a cabo un proceso a puerta cerrada para elegir a un líder nacional de dicho instituto político.
Mencionaron que una de las ilegalidades de todo el procedimiento que siguió el PRI en las últimas semanas, se refiere a que la ley establece con claridad que los partidos no pueden hacer un proceso electivo para cambiar dirigencia, antes de la conclusión del proceso electoral federal.