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El papa Francisco hizo un llamado este domingo para que los próximos Juegos Olímpicos de París 2024, que darán inicio el viernes, sirvan como una oportunidad para detener temporalmente los conflictos armados alrededor del mundo.
El líder de la Iglesia Católica expresó su deseo de que los atletas actúen como «mensajeros de paz».
En su mensaje después del rezo del Ángelus dominical, subrayó la capacidad del deporte para unir a personas de diversas culturas de manera pacífica.
Recordó a los asistentes en la Plaza de San Pedro que esta semana se inauguran los Juegos Olímpicos de París, seguidos por los Juegos Paralímpicos.
¿Cómo es la tregua olímpica del papa Francisco?
El pontífice, quien ha solicitado una tregua olímpica en varias ocasiones recientes, expresó su esperanza de que este evento sirva como un símbolo del mundo inclusivo que se aspira a construir.
Enfatizó que los atletas, a través de su participación, pueden ser portadores de paz y modelos a seguir para los jóvenes.
Resaltó la antigua tradición de las Olimpiadas como un momento para cesar los conflictos bélicos, manifestando su deseo de que los Juegos Olímpicos de París sean una oportunidad para demostrar una verdadera voluntad de paz.
«No olvidemos que la guerra es una derrota», afirmó, instando a la comunidad a rezar por la paz y a recordar a las naciones afectadas por la guerra, como Ucrania, Palestina, Israel y Myanmar.
El viernes pasado, envió un mensaje similar al arzobispo de París, Laurent Ulrich, pidiendo una tregua olímpica y ofreciendo su bendición para el evento.
En su mensaje, expresó su ferviente deseo de que todos respeten esta tregua y que Dios ilumine las conciencias de los líderes mundiales para que asuman sus responsabilidades en la búsqueda de la paz.
En junio, los líderes del G7 también respaldaron la tregua olímpica, instando a todas las naciones a adherirse a este compromiso en una declaración conjunta firmada por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido.
La tregua olímpica, que tradicionalmente aboga por un cese de hostilidades durante las dos semanas de los Juegos, enfrenta este año un desafío particular debido a los conflictos en Ucrania y la Franja de Gaza, dos guerras con gran impacto mundial.
Este llamado del Papa Francisco subraya la importancia de los Juegos Olímpicos como una plataforma para la paz y la unidad global, más allá del ámbito deportivo.