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En las últimas semanas, distintos puntos de la Ciudad de México se han visto afectados por las inundaciones provocadas por las fuertes lluvias, las cuales de acuerdo con un científico de la UNAM tienen una razón de ser, posiblemente relacionada con la ubicación en la que se desarrolló este asentamiento urbano.
Al respecto, David Adams del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la UNAM, explica que este año, en efecto, se registró un mayor número de precipitaciones en el país, siendo septiembre, el mes más activo.
“Este año en particular empezaron más tarde las lluvias. Generalmente a principios de mayo y comienzos de junio en esta región comienza a llover con más frecuencia”, explicó el doctor Ciencias Atmosféricas para una cápsula informativa de UNAM Global TV.
El especialista explica que las inundaciones de este año son una consecuencia de la continuidad con la que ha llovido en las últimas semanas.
“Por lo que he visto, no es que sean tan fuertes (las precipitaciones), pero sí es bastante agua, lo diferente de ahora diría que es la continuidad de la lluvia en estas últimas semanas”, dijo.
Y es que recordemos que en sólo en lo que va de septiembre, la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la capital ha emitido cinco alertas amarillas por inundaciones, dos naranjas y dos púrpuras, índices mayores a los registrados en los últimos años.
El experto sugiere que también hay un posible origen del aumento de lluvias por «El niño”, un evento climático que se genera cada cierto número de años por el calentamiento del océano Pacífico. Además del frente frío número 1 y el fenómeno conocido como monzón, mismo que provoca un cambio drástico en condiciones normales de lluvia y temperatura.
¿Qué otros factores intervienen en las severas inundaciones?
Cabe mencionar que otro de los grandes problemas que enfrenta la Ciudad de México deriva de su ubicación dentro de la Cuenca del Valle de México, rodeada de cerros y montañas que favorecen la concentración de las precipitaciones en zonas pobladas.
Además de que el sistema de drenaje parece insuficiente para cubrir las necesidades de más de 9 millones 209 mil 944 habitantes, que generan toneladas de basura diariamente provocando el estancamiento de agua en las principales avenidas.